Sorry, de Justin Bieber, es una de las canciones más pegajosas del 2015, pero Hands to Myself, de Selena Gomez, no se queda atrás. Los cantantes y ex novios que medio mundo quiere ver de nuevo juntos, se reunieron de una u otra forma en un magnífico mashup interpretado por Troye Sivan.
El cantante australiano tomó ambos temas y los transformó de tal manera que quedaran perfectamente entremezclados bajo un nuevo y angelical ritmo.