Robbie Williams se sacrificó (sii.. claro) y cumplió el pedido de una fan que quería su firma para hacerse un tatuaje con ella, demostrando que él no le niega nada a sus fans. P
El cantante estaba en Gotemburgo, Suecia, y delante de 65 mil fans hizo caso al cartel: “Por favor, firma mi trasero para poder hacerme un tatuaje”.
La admiradora no podía creerlo:
“Esto es fantástico, pero no pude dormir en toda la noche y tampoco me atreví a ducharme a pesar del calor que hacía. Soy una gran fan de Robbie desde los 12 años y conocerle ha sido totalmente surrealista”