Tiene 13 años, nació en California y "Friday", su primer sencillo, acumula más de 30 millones de reproducciones en el portal YouTube. El clip se convirtió en viral no precisamente por lo bien producido que está, y más bien, “Friday” es considerada “la peor canción pop de la historia”.
Antes del gran salto a la fama, Black era una estudiante de secundaria en Anaheim Hills, California.
Creció escuchando a cantantes adolescentes, como Selena Gomez, Jonas Brothers y Justin Bieber.
Sin vislumbrar aún el estrellato, Rebecca comenzó a actuar en público en 2008 para las celebraciones del Día de la independencia estadounidense. Tras una audición en la escuela, la pequeña asistió a un campamento de verano donde aprendió música.
En el 2010, es tentada por una compañera de clase, y participa en la grabación de un single bajo el pequeño sello discográfico ARK Music Factory. La madre de Rebecca pagó cerca de $2000 por un paquete que incluye la opción de grabar dos canciones y la mitad del costo de un video musical.
Como una de las canciones que vino en el paquete habla del amor adulto, Rebecca eligió cantar “Friday”, que más bien habla sobre salir con los amigos y divertirse.
Los creadores de “Friday” son Clarence Jey y Patrice Wilson, quienes jamás se imaginaron el éxito de la canción, que llegó a la tienda virtual iTunes el 14 de marzo y en menos de una semana, pasó de 3 mil reproducciones a 18 millones.
La incipiente nueva estrella pop asegura que el video clip apenas le costó U$S 1.400 y con 13 años confiesa que siempre soñó con ser cantante.
Y aunque la prensa musical no la halagado precisamente, ella ha conseguido estar en boca de todos, e incluso está haciendo temblar el trono que actualmente ocupa el ídolo adolescente Justin Bieber.