El concurso Miss Reef Internacional 2011, uno de los certámenes más esperados de esta temporada, reunió a ocho de las mujeres más bellas de esta parte del mundo, provenientes de Argentina, Venezuela, Costa Rica, Brasil, Ecuador y, por supuesto, Perú -el país anfitrión de este año-.
Las paradisíacas instalaciones del hotel Aquavit, en Asia, fueron el fondo para una candente pasarela, donde las concursantes mostraron sus encantos; frente a un selecto panel de jueces, integrado por Vanessa Tello, Miss Reef Internacional 2010, el organizador del evento de belleza Javier Menéses y el productor Nino Peñaloza, entre otras personalidades.
Por Perú se hicieron presentes las modelos Giannina Luján, Rocío Miranda (integrante del equipo de vóley de Universitario de Deportes) y Korina Rivadeneyra, quienes lucieron sus mejores atributos vestidas solo con diminutos bikinis, que acentuaban sus generosas curvas.
La ‘delegación’ peruana, compuesta por tres de las concursantes más aplaudidas de la noche, consiguió pasar la primera ronda de eliminación, junto a la brasileña Sandra Alionco y la argentina Victoria Alvarez.
Tras una breve deliberación de los jueces, Giannina, quien se había llevado hace solo una semana el título de la ‘mejor colita del país’, no logró pasar a la final, ni tampoco la despampanante Victoria.
Paradójicamente, Rocío y Korina (segundo y tercer lugar del Miss Reef Perú 2011, respectivamente) sí pudieron mantenerse en la competencia, junto a Sandra, una belleza de cabellera blonda.
La última consulta del jurado, luego que las finalistas lucieron sus caderas con movimientos lentos y sensuales, dio como ganadora a Sandra Alionco, dejando en segundo lugar, por un empate técnico, a la dupla peruana.
“La competencia estuvo fuerte. Nunca esperaba ganar. Me siento emocionada, contenta. ¡Gracias!”, dijo brevemente la ‘mejor colita del mundo’, tras recibir la corona de flores del Miss Reef Internacional 2011, de manos de su antecesora, Vanessa Tello, y un jugoso cheque por 3 mil dólares, otorgado por la reconocida marca de surf.
Sandra se emocionó tanto por su triunfo que no dudó en celebrar saltando, mientras se deslizaban un par de lágrimas de alegría en su rostro. Sin embargo, la felicidad le duró poco, pues minutos después tuvo que abandonar el escenario, resguardada por varios robustos agentes de seguridad, pues, según explicó luego, se le había bajado la presión.