La conejita de Playboy, Kendra Wilkinson, volvió a ser carátula de la revista que la llevó a la fama, a pesar que ella misma había negado su regreso a las portadas debido a que no quería mostrar la cicatriz de la cesárea.
Ella explicó su decisión a través de su blog oficial. “Hola chicos! Quería aclarar algo. Muchos de ustedes vieron en mi programa que yo estaba luchando entre decidir si posar para Playboy o no. Ahora estoy en la portada de diciembre de Playboy, pero las fotos no son de una sesión reciente”, señaló Wilkinson.
“Las fotos son de una sesión que hice hace 2 años cuando todavía vivía en la mansión. Me siento halagada de estar en la tapa de nuevo y como todos ustedes saben, Playboy tiene un lugar muy especial en mi corazón”, continuó la sexy rubia despejando las dudas de sus fans.
Asimismo, Kendra insiste en que se siente muy bien consigo misma actualmente. Volvió a vivir el Los Angeles con su bebé Hank Jr. mientras Hank Basket, su marido, está en Minessotta jugando para los Vikingos.