La joven diva del pop, Katy Perry apareció en la alfombra roja de la gala junto a su esposo, el actor Russell Brand, luciendo un larguísimo vestido con alas de ángel en los hombros.
Minutos después, la belleza de cabellera oscura se despojó de sus prendas para reaparecer, cantando su hit con un diminuto vestido de color rosa, que dejaba al descubierto sus delineadas piernas.
Ella se ganó rápidamente al público presente en el Staples Center de Los Ángeles, entre los que se encontraba la actriz Nicole Kidman, quien no paraba de tararear el tema.