Un juez penal de Costa Rica convocó a una audiencia privada para el próximo 29 de abril, por el caso de dos fotógrafos a quienes un guardaespaldas les disparó en abril de 2009, después de que se negarán a entregar imágenes tomadas de la boda de la modelo brasileña Gisele Bündchen y el deportista Tom Brady.
El fotógrafo de la agencia de noticias francesa AFP Yuri Cortez declaró hoy a Efe que "el inicio de esta etapa es de alguna manera satisfactorio" y manifestó que su deseo es que "se haga justicia" para él y Roberto Avilés, el otro fotógrafo demandante, quien era corresponsal del diario costarricense Al Día.
"Me siento un poco contento de que al fin, después de dos años, haya por lo menos muestras de que va a haber algo porque durante mucho tiempo estaba decepcionado de que el proceso y el sistema judicial funcione tan lento", dijo Cortez, quien es director de fotografía de AFP para Centroamérica.
Los hechos ocurrieron en abril de 2009 en playa Santa Teresa, provincia de Puntarenas (en el Pacífico costarricense), cuando Cortez y Avilés fueron interceptados en la vía pública por guardaespaldas de Bündchen y Brady para que entregaran el material fotográfico que habían recopilado de la boda desde una propiedad cercana a la mansión de la supermodelo.
Tras una serie de forcejeos, los fotógrafos, que no entregaron el material, subieron a un vehículo que habían rentado y cuando se alejaban de la zona uno de los guardaespaldas disparó y el balazo quebró el cristal trasero y estuvo a punto de herir a Cortez, según el relato del fotógrafo.
La audiencia preliminar privada, en la que se definirá si el caso va a juicio, se celebrará en el Juzgado Penal de Puntarenas y a ella están convocados los dos fotógrafos y los tres guardaespaldas que están involucrados en la demanda.
Los guardaespaldas son de la empresa costarricense de seguridad privada AVAHUER y han sido identificados como Miguel Solís Méndez, Alexander Rivas Barahona y Manuel Valverde Vargas, a quienes se les acusa por el delito de tentativa de homicidio.
Cortez asegura que el grupo de guardaespaldas que intentó quitarle su material era más numeroso y que incluso había algunos estadounidenses, pero que los tres acusados son quienes portaban el arma y uno de ellos disparó.
Los fotógrafos también interpusieron una demanda en Nueva York contra Bündchen y Brady -jugador de fútbol americano-, pero según Cortez el proceso se encuentra en "un bache", pues la pareja cambió de domicilio, por lo que los tribunales de esa ciudad descartaron llevar el caso.
El día de la boda, en los alrededores de la mansión se desplegó un amplio operativo a cargo de oficiales de seguridad privada, con la intención de garantizar la privacidad y evitar que las decenas de fotógrafos y periodistas presentes en el lugar obtuvieran alguna información.
EFE