Este fin de semana, Ernesto Pimentel sorprendió a sus televidentes luego de mandar un mensaje al final de su programa “El Reventonazo de la Chola”, pues muchos aseguran que al parecer el cómico le habría dejado un mensaje a Alex Brocca.
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¿Qué pasó con Ernesto Pimentel?
Durante la última edición de “El Reventonazo de la Chola”, se vivió un sorprendente momento al final del programa, cuando Ernesto Pimentel decidió interpretar la canción “Tomar para Olvidar” que grabó hace años junto a Armonía 10. Sin embargo, nadie se imaginó que al final del tema mandaría un mensaje.
Pocos segundos antes que Ernesto Pimentel, finalizara la triste canción, llegó a expresar una sentimentales palabras y este mensaje sorprendió a varios usuarios pues consideran que esa parte estaría dedicado a Alex Brocca.
“Voy a olvidar el daño que nos hicimos, pero el amor que arriba nos espera”, señaló Ernesto Pimentel tras finalizar de interpretar la canción, que también aparece en el soundtrack de su película ‘Chabuca’.
Asimismo, Ernesto Pimentel durante su presentación no dudó en levantar la mirada al cielo, cuando resaltó: “Sabes que te quise de verdad”. Al parecer varios de sus seguidores consideran que esta parte, podría estar dedicada a Alex Brocca.
Ernesto Pimentel "la chola Chabuca" le dedica la canción "tomar para olvidar" a Alex Brocca pic.twitter.com/f1mXamcsWz
— Dangayo (@Dangayo270566) April 22, 2024
Ernesto Pimentel defiende su película
Por otro lado, Ernesto Pimentel en otro momento de su programa se mandó con un contundente mensaje, en donde no dudó en defender su película:
“Es el primer programa y todos estamos emocionados, pero abrir una herida, es una historia que no tiene buenos ni malos, abrir una herida es una oportunidad para celebrar la vida diciendo que cada minuto vale, que cada momento hay que celebrarlo. Además, que todos debemos ser la mejor persona que podamos, yo seguiré en la lucha de ponerle luz a quienes lo tienen”.
Como se sabe, Alex Brocca en su libro “Canto de Dolor” reveló extensamente cómo fue su primer encuentro con Ernesto Pimentel, pues en un momento del libro menciona:
“Llegó a mi vida cuando estaba carente de amor, no tenía ni un perro que me ladrara, o por lo menos era eso lo que creía. Francamente yo no sabía si estábamos o no. Juntos, él era pura ternura; ninguna otra pareja me había tratado con tantas atenciones. Sin embargo, cuando se lo proponía era lo suficientemente cruel para sacarme de cuadro”.
