Channing Tatum desearía poder dejar de entrenar a conciencia, pero cree que no debe hacerlo porque los papeles que le mandan le obligan a lucir cuerpo.
“Honestamente, no soy tan buen actor como para poder dejarme la camisa puesta en una película, así que sí, entrenaré de nuevo. Créeme, me encantaría [dejar de entrenar] pero siempre tendré que hacerlo”, aseguraba en la revista Heat.
En cualquier caso, los deportes son esenciales en la vida de Channing, y se siente afortunado por ello porque si no se dejaría llevar por el “niño gordo” que hay dentro de él y que disfruta con las comidas calóricas.
“Tengo un niño gordo dentro de mí. Menos mal que me gustan los deportes, porque me gusta comer. Me gusta la cerveza y la pizza, y las hamburguesas y las patatas, y dejarme llevar por todo ello. Y Cheetos. Una enorme bolsa de Cheetos“.
Estos vicios le hicieron particularmente difícil ver a los integrantes del equipo de la película Magic Mike XXL alimentarse de comida basura mientras él estaba siguiendo una estricta dieta.
“Lo que encontré más difícil es estar en el set de rodaje mientras el equipo comía comida rápida. Verles me mataba. Comían todo eso delante de ti y te miraban mientras lo hacían. Era una tortura”, confesaba Channing.