Emma Watson está en su año sabático enfocandose en los derechos de la mujer en todo el mundo. Ya fundó la organización en pro de la equidad, HeForShe en 2014, mismo año en que fue designada Embajadora de Buena Voluntad por la ONU.
Para promover la iniciativa, Watson figura en la portada de la edición Mujeres y Hombres de Esquire UK, junto a Tom Hanks, su coestrella en The Circle.
“Si ves su carrera. Muchas de sus películas como Big A League of Their Own, Sleepless in Seattle han tenido directoras mujeres”, asegura Watson.
Alaba la forma en que Hanks aborda los temas como los derechos gays, el SIDA, los problemas ambientales, los veteranos. “Él habla con tal humildad y gracia y es una voz con tanta credibilidad”, indicó.
Se ha convertido en una autoridad en el tema de la igualdad de género, ya que ha experimentado el sexismo de primera mano. “Me han golpeado en el trasero al salir de un cuarto, me he sentido asustada al salir de casa en la noche, gente me ha seguido. No hablo mucho de estas experiencias porque viniendo de mí sonarían como gran cosa y no quiero que esto sea sobre mí, sino sobre las mujeres que han experimentado cosas mucho peores”.
Watson también ha padecido el sexismo en la industria del cine. Después del hackeo de Sony en 2014 cuando se supo que Amy Adams y Jennifer Lawrence ganaron mucho menos que sus coestrellas masculinas, muchas estrellas como Lawrence abordaron el tema de la diferencia de género en cuanto a pagos.
Watson quisiera que esa conversación continúe hasta que la brecha no exista. “No debemos hablar de dinero porque la gente cree que eres difícil o una diva. Pero hay una voluntad ahora en la que decimos: no importa, llámame diva. Llámame feminazi, llámame difícil, llámame feminista de primer mundo, llámame como quieras, eso no me detendrá por intentar hacer lo correcto. Porque simplemente no me afecta”, aseguró.
Es un tema que afecta a todas las mujeres. “Seas una mujer en una plantación en Kenya o una corredora de bolsa en Wall Street o una actriz de Hollywood, a nadie le pagan lo mismo”, señaló.
Dándole vida el movimiento HeForShe y motivando a los hombres a apoyar el feminismo ha sido su mayor regocijo. “Siento que hago lo que debería estar haciendo”, concluye.
